¿Qué tratamientos pueden provocar la caída del cabello?

¿Cuál es el ciclo de vida del cabello? 

El cuero cabelludo medio tiene entre 100.000 y 150.000 pelos. Estos se renuevan a un ritmo de 150 pelos nuevos al día. Su crecimiento está sujeto a numerosos factores genéticos y hormonales y evoluciona a lo largo de la vida.  

Todos los cabellos pasan por 3 fases durante su vida: 

• La fase de crecimiento, conocida como anágena, que dura entre 2 y 6 años, 
• La fase de reposo, llamada catágena, que dura unas 3 semanas, 
• Luego viene la fase telógena, que provoca la caída del cabello en 2 o 3 meses. Un nuevo pelo ocupará el lugar del que acaba de desaparecer. 

Esta sucesión de fases constituye un ciclo que dura una media de 4 años. 

La raíz del cabello se encuentra en los folículos pilosos, que son pequeñas cavidades en el cuero cabelludo. El número de folículos pilosos es fijo y no cambia después del nacimiento. Cada uno de estos folículos puede proporcionar entre 10 y 30 ciclos. 

Los pelos no están sincronizados, es decir, no están en la misma fase al mismo tiempo. 

Por lo tanto, la caída del cabello es un fenómeno completamente normal. Perdemos entre 30 y 150 pelos al día, con variaciones a lo largo del año.  

De hecho, al principio del otoño y de la primavera, la pérdida de cabello suele ser mayor. Además, las mujeres experimentan una caída del cabello unos meses después de dar a luz, debido a los cambios hormonales que se producen en ese momento. 

Sin embargo, ciertos tratamientos pueden provocar una importante pérdida de cabello. 

¿Qué tratamientos pueden causar alopecia?? 

Algunos medicamentos pueden alterar el ciclo capilar. Estos actúan de diferentes maneras. Por ejemplo, algunos fármacos "sincronizan la fase de caída del cabello" y provocan la pérdida del mismo al cabo de 2 o 3 meses. Otros fármacos interrumpen bruscamente la fase de crecimiento y provocan una grave caída del cabello entre 1 y 4 semanas después de iniciar el tratamiento. 

Se aconseja a los médicos que discutan el tema de la alopecia con los pacientes antes de iniciar el tratamiento, ya que puede tener importantes consecuencias psicológicas. 

Pero entonces, ¿cuáles son estos tratamientos? 

Los tratamientos para la tiroides

La glándula tiroides segrega hormonas que, entre otras cosas, intervienen en la renovación del cabello. Cuando se producen en exceso o en defecto, estas hormonas pueden alterar fuertemente el ritmo del ciclo capilar y, por tanto, provocar alopecia. 

Cuando los fármacos antitiroideos (como Neo-tomizol®) o las hormonas sustitutivas de la tiroides (como Levotiroxina®) no están perfectamente dosificados, el riesgo de caída del cabello es elevado. 

Los medicamentos contra el exceso de colesterol

Los tratamientos contra el colesterol, como los fibratos (Eulitop®, Difaterol®...) o ciertas estatinas (Atoris®, Atorvastatina®...), pueden provocar efectos secundarios en el cuero cabelludo, provocando picores o la caída del cabello. 

Se dice que estos medicamentos, tomados a largo plazo para tratar la hipercolesterolemia y prevenir las enfermedades cardiovasculares, interfieren en la producción de cabello (queratinización). Como resultado, el cabello se vuelve frágil antes de caer. 

Si notas una pérdida de cabello importante, es aconsejable que hables con tu médico. Este podrá modificar tu tratamiento. 

Los medicamentos contra la epilepsia 

Uno de los efectos secundarios de los tratamientos contra la epilepsia, incluido el valproato sódico, es la caída del cabello o incluso un cambio en su naturaleza (de liso a rizado).  

Los investigadores aún no han dilucidado del todo el mecanismo por el que el valproato sódico (Depakine®) puede provocar la caída del cabello o cambios en el mismo. La hipótesis de que está implicada en la carencia de oligoelementos (zinc, magnesio, cobre, etc.) esenciales para la vida del cabello está, por el momento, principalmente explorada. 

Incluso si la caída del cabello es un fenómeno reversible y este es el caso tan pronto como se interrumpe el tratamiento, habla con tu médico al respecto, ya que podría modificar tu tratamiento. 

Ciertos tratamientos antidepresivos

Algunos antidepresivos pueden provocar la caída difusa del cabello, especialmente en las mujeres. Bajo el efecto de estos fármacos, los ciclos capilares pueden acortarse. Así, el cabello puede empezar a caerse a los 2 ó 3 meses de iniciar el tratamiento. 

Si notas la aparición de alopecia, no dudes en hablar con tu médico, que podrá modificar tu tratamiento. 

Ciertas píldoras anticonceptivas

El cabello es muy sensible a las variaciones hormonales. Dependiendo de su composición en hormonas sexuales, los anticonceptivos tendrán una influencia positiva en el cabello o, por el contrario, pueden provocar su caída. Los anticonceptivos con efecto androgénico (que contienen derivados de la testosterona) pueden provocar la caída del cabello. 

No dudes en hablar con tu médico sobre esto, para que te cambie el anticonceptivo oral. 

Los tratamientos de quimioterapia 

Si bien la alopecia es un efecto secundario relativamente infrecuente de los tratamientos mencionados, es un efecto secundario común y muy temido de los pacientes sometidos a quimioterapia. El objetivo de estos tratamientos es atacar las células que se renuevan muy rápidamente (es decir, las células cancerosas), bloqueando así el nacimiento y la multiplicación del pelo. 

Este es un fenómeno reversible, pero es necesario esperar hasta el final del tratamiento. Es posible utilizar pelucas, turbantes o pañuelos para sentirse más cómodo con su nueva imagen.  

Puedes encontrar más consejos en nuestro artículo: Consejos de belleza para combatir el cáncer de mama