La artritis
¿Qué es la artritis?
La artritis a menudo designa una enfermedad causada por la inflamación de las articulaciones. Cabe señalar que la artritis puede aparecer en dos formas: aguda o crónica. Aunque generalmente es benigna, la artritis puede tener consecuencias incapacitantes a largo plazo. Por lo tanto, no hay una sola artritis, sino varios tipos de artritis.
Las formas de la artritis
La artritis puede afectar a un mayor o menor número de articulaciones.
Hablamos de monoartritis cuando sólo se ve afectada una articulación. La poliartritis es una artritis en la que intervienen varias articulaciones.
La artritis también puede ocurrir a cualquier edad, como es el caso de la artritis reumatoide juvenil; el otro tipo muy común de artritis es la osteoartritis, también llamada artrosis.
Las causas de la artritis
Reumatismo e infecciones
Los orígenes de la artritis provienen de dos fuentes principales.
El reumatismo puede ser la causa. Esto se debe a la fricción excesiva de un tendón contra una articulación o un hueso.
La artritis también puede ser causada por una infección. Este es el caso de la enfermedad de Lyme, por ejemplo.
Artritis, un síntoma de otras enfermedades
La artritis también puede ser un síntoma de otra enfermedad. La artritis psoriásica, por ejemplo, es una enfermedad que reproduce los síntomas de la artritis en pacientes con psoriasis.
El lupus, una enfermedad autoinmune crónica, y la espondilitis anquilosante, una enfermedad inflamatoria que afecta a las vértebras dorsales, son dos enfermedades en las que la artritis es uno de los principales síntomas.
Otras causas de artritis
Sin embargo, la artritis puede deberse a otras causas.
Es el caso de la artritis reumatoide, una enfermedad inflamatoria que afecta a muchas articulaciones: manos, pies, muñecas, etc. Las causas de la artritis reumatoide son principalmente la herencia, el estilo de vida y especialmente una causa autoinmune (el sistema inmunológico del paciente se ataca a sí mismo).
Síntomas de la artritis
Existen varios tipos de artritis y, por lo tanto, síntomas muy diferentes. De manera similar, dependiendo de su ubicación y de su estado de desarrollo, el dolor experimentado debido a la artritis varía entre los pacientes.
El síntoma general de la artritis es una inflamación de los tendones, que se vuelve muy dolorosa con el tiempo, especialmente durante el esfuerzo físico y las punzadas que siente el paciente, que a veces son diarias.
La bursitis (inflamación/hinchazón de la articulación), el enrojecimiento, las sensaciones de calor, la rigidez de la articulación y la disminución de las habilidades motoras articulares son síntomas que también son específicos de la artritis.
Las complicaciones de la artritis
Las complicaciones de la artritis pueden ser graves para la vida diaria de los pacientes.
La degradación de las articulaciones y la pérdida gradual de control sobre ellas son consecuencias de la artritis. Estas complicaciones pueden ocurrir gradualmente, como puede verse en la artrosis, una enfermedad articular que afecta al cartílago.
La artrosis es, de hecho, una de las formas de artritis que ocurre con el envejecimiento del cartílago. La artrosis es una artritis que se produce con el "desgaste" y que afecta con mayor frecuencia a los ancianos. Sin embargo, el sobrepeso y la práctica muy intensiva de un deporte que requiere una articulación muy específica pueden provocar artrosis.
En la enfermedad de artritis séptica (enfermedad articular de origen infeccioso), estos efectos sobre las articulaciones se producen mucho más rápidamente.
Tratamientos para la artritis
Para cada tipo de artritis existe un tratamiento adecuado.
Luchar contra el dolor
Para combatir el dolor, se pueden prescribir analgésicos. Se proponen esteroides y AINE (fármacos antiinflamatorios no esteroideos), que actúan tanto en la reducción del dolor como contra la inflamación. Para algunos tipos de artrosis, como la artritis reumatoide, también se pueden utilizar fármacos como los antirreumáticos.
Si los tratamientos mencionados anteriormente no funcionan, se debe considerar la posibilidad de inyectar corticosteroides directamente en las articulaciones afectadas. Sin embargo, esta opción sigue siendo secundaria.
Adaptar su estilo de vida
En general, el reposo, el sueño equilibrado, la actividad física, una buena nutrición y un estilo de vida saludable ayudan a reducir el dolor de la artritis.
Por ejemplo, dependiendo del tipo de dolor articular, se recomiendan algunos ejercicios físicos en lugar de otros. Los ejercicios de musculación proporcionan un mejor soporte para las articulaciones, mientras que el estiramiento está diseñado para mantener los músculos y los tendones tan flexibles y móviles como sea posible.
El uso de especialistas en salud también puede ayudar a minimizar los síntomas de la artritis. Fisioterapeutas, masajistas y ergoterapeutas actuarán según corresponda.
Publicado el 17 oct. 2019